¿Qué es el síndrome de congestión pélvica?

El síndrome de congestión pélvica (PCS) ocurre cuando las venas dentro y alrededor de la pelvis se agrandan. Estas venas agrandadas pueden causar una reducción del flujo sanguíneo, lo que a menudo resulta en un dolor crónico y, en ocasiones, debilitante. 

El PCS es más común durante la edad fértil. Las mujeres que han tenido un hijo tienen un mayor riesgo, al igual que las mujeres que tienen un familiar que ha experimentado PCS.

¿Cuáles son los síntomas del síndrome de congestión pélvica?

Algunos síntomas comunes son:

  • Dolor pélvico o molestias que empeoran a medida que avanza el día.
  • Dolor pélvico que empeora durante la menstruación, después de tener relaciones sexuales o después de ciertas actividades físicas.
  • vulva hinchada
  • Venas varicosas en la región genital o las piernas.
  • Hemorroides
  • Dolor lumbar
  • Secreción vaginal
  • Sangrado vaginal anormal
  • Fatiga
  • Frecuencia urinaria o incontinencia
Mujer asiática con dolor pélvico

¿Qué es la embolización de las venas pélvicas?

La embolización de las venas pélvicas es un procedimiento no quirúrgico mínimamente invasivo. Por lo general, se realiza de forma ambulatoria e implica el uso de anestésico local y sedación limitada.

Aunque existen otras opciones de tratamiento, la embolización suele ser el tratamiento preferido cuando se diagnostica PCS. El procedimiento se utiliza para minimizar el flujo sanguíneo anormal que causa los síntomas dolorosos.

Durante el procedimiento, se inserta un tubo delgado (llamado catéter), aproximadamente del tamaño de un hilo de espagueti, a través de una vena en la ingle, el cuello o la muñeca y se guía hasta el área afectada de la pelvis. Para sellar la vena agrandada y defectuosa y aliviar la presión del flujo sanguíneo excesivo, se insertan pequeños tapones (conocidos como “bobinas”) junto con un medicamento para promover la formación de tejido cicatricial (un agente esclerosante idéntico al que se usa para cerrar las venas varicosas). .

Este procedimiento ambulatorio implica una sedación de leve a moderada y dura poco más de una hora, y luego se monitorea al paciente durante algunas horas antes de que, por lo general, se le dé el alta para irse a casa. Después del procedimiento, los pacientes suelen poder volver a su rutina de trabajo normal en una semana. Pueden ocurrir síntomas leves durante la recuperación, incluidas náuseas y malestar. Más del 75% de los pacientes experimentan una mejoría en sus síntomas.

¿Este tratamiento es adecuado para usted?

Dependiendo de sus síntomas y su gravedad, el tratamiento puede ser terapia médica, tratamiento quirúrgico o embolización. Cuando se diagnostica PCS, la embolización suele ser el tratamiento indicado.

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Mujer hablando con el médico sobre el síndrome de congestión pélvica.